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La polución ambiental de aire y agua, la contaminación de suelos y alimentos con aditivos y pesticidas y la industrialización, pueden producir intoxicación por metales pesados (mercurio, aluminio, cadmio, plomo, etc).
El organismo no metaboliza en forma correcta estos metales, que producen lesión celular a través de radicales libres, o como factores de riesgo o precipitación para enfermedades degenerativas y crónicas, neurodegenerativas (síndrome demencial, pérdida de la memoria), cáncer y otras enfermedades comunes sin respuesta al tratamiento (depresión crónica, hipertensión arterial, etc).
Los minerales nutricionales como el hierro, sodio, potasio, calcio, cobre, entre otros, son de transición porque si aumenta su concentración orgánica, reaccionan como metales pesados y producen lesión celular.
El cuadro clínico de la intoxicación crónica por metales pesados es inespecífico, se manifiesta luego de varias décadas, y compromete órganos vitales. El dosaje de estas sustancias se realiza en tejidos si la intoxicación es crónica; y en sangre y orina, si es aguda.
El método de elección es el Mineralograma del cabello (OMS).
El tratamiento es la Quelación que utiliza substancias medicamentosas con capacidad de unirse a estos tóxicos. Se aplica por vía oral o parenteral (IM, EV o rectal) en forma ambulatoria.
No debemos culpar a la edad por el estado de nuestra salud, puede ser por intoxicación con algún metal pesado. Existe un diagnóstico preciso y soluciones terapéuticas preventivas y curativas con la medicina orthomolecular.