Los suplementos dietarios son productos con características nutricionales idénticas a los alimentos. El avance de la ciencia y la tecnología permite producir en su fórmula los principios activos de nutrientes aislados y seleccionados.
Son concentrados nutricionales comercializados bajo la forma de cápsulas, polvo, comprimidos, líquidos, granulados, tabletas, entre otros formatos.
Los beneficios o riesgos relacionados al consumo de suplementos son exactamente iguales a la ingesta excesiva o insuficiente de cualquier alimento.
Los suplementos pueden ser de tipo Hipercalóricos, caracterizados por un valor energético alto, están compuestos por carbohidratos y aminoácidos esenciales. Hiperproteicos / Aminoácidos: son suplementos proteicos compuestos de aminoácidos esenciales para la formación de músculos y otros tejidos. Termogénicos: contribuyen al aumento del metabolismo, pérdida de peso y grasa corporal. Antioxidantes: refuerzan las defensas antioxidantes endógenas contra los radicales libres -responsables de numerosas patologías y envejecimiento precoz. Polivitamínicos y Minerales: indicados como complemento diario. Hormonales, contienen sustancias que estimulan la producción de hormonas; deben ser indicados previa evaluación médica.
Las restricciones en el consumo de estos suplementos pueden estar relacionadas con el estilo de vida y antecedentes clínicos individuales.
En atletas y personas que practican actividades físicas son indicados como aditivos naturales para mejorar el rendimiento y acortar el tiempo de recuperación. En personas saludables son recomendados los suplementos si presentan algún déficit de nutrientes.
El suplemento es un aliado en los procesos de selección, diseño y supervisión de una buena nutrición para su bienestar y salud.